Puede ser donante de progenitores hematopoyéticos cualquier persona con buena salud y que su HLA sea compatible con el receptor.
Para realizar un trasplante hematopoyético con éxito es necesario disponer de un donante compatible con el paciente. Ser compatible significa que las células del donante y del paciente son tan parecidas que pueden convivir indefinidamente en el receptor.
Solo en el 25 % de los casos encontramos un donante compatible familiar, normalmente un hermano, para el resto debemos acudir al REDMO (Registro Español Donantes Médula Ósea)
Para ello necesitamos que el HLA (antígenos leucocitarios humanos) sea idéntico o muy parecido, para que los mecanismos de defensa inmunológicos no rechacen el injerto de las nuevas células trasplantadas.
En REDMO se puede inscribir cualquier persona entre 18 y 40 años, residente en España siempre que disfrute de buena salud. Aunque el donante estará en registro con la posibilidad de donar hasta los 60 años, los donantes más jóvenes (menores de 35 años) son los más solicitados y con los que se obtienen mejores resultados clínicos en los pacientes que se trasplantan.
Lógicamente, no pueden serlo los portadores de determinadas enfermedades infecciosas que se transmiten por vía sanguínea (VIH, hepatitis, etc.).
Los criterios de exclusión para ser donantes de médula ósea serán los siguientes:
Edad inferior a 18 años o superior a 40 años.
Sufrir hipertensión arterial no controlada o diabetes mellitus insulindependiente
Sufrir enfermedad cardiovascular, pulmonar, hepática o hematológica y en general cualquier patología que suponga un riesgo sobreañadido de complicaciones para el donante (bien por la anestesia general o epidural o bien por la propia extracción de la médula ósea).
Tener antecedentes o tener conocimiento de ser positivo de los marcadores serológicos de hepatitis B, hepatitis C o alguna otra patología infecciosa potencialmente transmitible al receptor.
Diagnóstico de SIDA Anticuerpos anti-VIH+ Tener riesgo subjetivo de VIH+: Ser drogadicto o tener antecedentes de drogadicción intravenosa o Mantener relaciones sexuales con múltiples parejas (homoxesuales, bisexuales, heterosexuales) Ser pareja de las dos categorias anteriores Ser hemofílico o pareja sexual de hemofílico Poseer impresión subjetiva de práctica de riesgo de SIDA. Lesiones en el último año de material posiblemente contaminado (tatuajes, material sanitario, acupuntura…)
Tener antecedentes de enfermedad tumoral maligna, hematológica o autoinmune que suponga riesgo de transmisión al receptor.
Haber sido dado de baja definitiva como donante de sangre o poseer criterios de exclusión definitiva como donante de sangre.
Los criterios de exclusión TEMPORALES para ser donantes de médula ósea serán los siguientes:
El embarazo. (Tras el alumbramiento y una vez concluida la lactancia se puede donar).
Los tratamientos anticoagulantes o antiagregantes (con aspirina, dipiridamol o similares),en función de la duración de los mismos.
Tatuajes o piercings, hasta trascurridos 6 meses desde su realización.
Existen otros muchos procesos no incluidos en el listado anterior que pueden dificultar la donación (tatuajes en la región lumbar, obesidad mórbida, malformaciones del cuello o la columna vertebral, posibles alergias a los anestésicos y déficits enzimáticos familiares, entre otros), por ello es recomendable que todo candidato consulte su caso particular antes de inscribirse como donante ya que algunas patologías contraindican la donación de médula ósea pero no la de sangre periférica y viceversa.
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